Típico de la región italiana de Emilia-Romagna es un queso sedoso y de
color amarillo pálido. Su sabor dulzón de los primeros meses, con el
tiempo se vuelve muy pronunciado, referenciando a trufas. Este sabor
único se debe a su proceso especial de maduración en fosas de alfalfa.
Recomendaciones: junto a miel orgánica y castañas.
*Las imágenes son ilustrativas.