Proviene de la baya seca del Molle, un arbusto originario de Sudamérica.
Su sabor recuerda al del ají, aunque más fresco, afrutado y menos
picante que el de las pimientas blanca y negra. Por la sutileza de su
aroma y picor se la usa en ensaladas y platos suaves como pescados y
mariscos. Recomendamos agregarla al final de la cocción, para que
conserve su delicado perfume y sabor.
*Las imágenes son ilustrativas.